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Howl es el aullido. El aullido del lobo. Un animal
bastante particular. Digamos que no es amante de las aglomeraciones.
Ni de las grandes ciudades. El lobo es un animal difícilmente
domesticable. Carece de leyes, no siente culpa, no hace
las cosas porque se supone que hay que hacerlas. Es salvaje
el lobo. Ahora, ese salvajismo bien podría funcionar
como un pequeño bálsamo ante tanta "civilización"
demostrada en esta era. En lo personal, si me dan a elegir
prefiero mantenerme salvaje. Pues si ésta es la
sociedad, y estas son las leyes, y éste es el sistema,
y ésta la realidad...elijo seguir aullándole
a la luna, de una manera absurda y muchas veces idiota.
Pero muy eficaz desde algunos ángulos. The Howl
es el aullido. El aullido es el sonido de la bestia cuando
se comunica con otros iguales. Un lobo aullando en la
espesura del bosque. Aullándole a otros lobos.
Pues así el lobo sabe que hay otros como él,
aunque no los vea.
The Howl será a partir de ahora una revista dedicada
a los buenos acontecimientos culturales. No los impuestos.
Los sinceros, los que parten de una premisa, los que
muestran substancia. Esos que cuando los tenés
enfrente te endulzan la vida, te hacen vibrar. También
será una revista donde el pensamiento tenga su
lugar. Donde se reúne espontáneamente
una pandilla de amigos periodistas. Y donde no dejaremos
de recordar. Puesto que pensar y recordar son dos verbos
importantes para conjugar a cada momento. Dos armas
formidables en esta desigual lucha entre ellos y nosotros.
Gracias
por acompañarnos.
Y no dejen
de aullar. Lo más fuerte que puedan. Cada noche
de sus vidas.
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